TODAS las noticias y TODA la información sobre la Villa de Ingenio la tendrás semanalmente aquí...
¡No busques más! TODOINGENIO->NOTICIAS

jueves, 3 de abril de 2008

MANOLO TIENE UNA NUEVA CASA

Manuel Andrés Hernández Guedes, el joven oligofrénico de Ingenio que llevaba veinte años ingresado en el Instituto Doctor Sacristán, en Sevilla, a donde viajó por carecer su tierra de centros adecuados, regresó ayer a la Isla y quedó internado en el Centro de Atención a Minusválidos Psíquicos (CAMP) de El Tablero.

Los padres de Manolo, que tardaron catorce años en encontrar los medios para enviar a su hijo a un centro especializado del que la Isla carecía por los años ochenta, han pasado veinte años guardando su ausencia, sólo mitigada por las visitas anuales a Sevilla.

El niño que salió de Ingenio con catorce años y midiendo 1,94 de estatura, ha regresado ahora, un poco más grueso y encorvado, pero con los mismos ojos intensamente azules azules y su locuacidad inconexa de siempre. En el aeropuerto estaban ayer sus familiares y amigos y Manolo, al decir de su padre, Pepe, «se portó como un hombre», aunque a veces se distraía mirando las bolsas que guardaban los regalos de los que han sido durante dos décadas su familia y amigos en el centro asistencial sevillano. Mantuvo la compostura al llegar al CAMP de El Tablero, donde fue estupendamente recibido por sus directivos y sólo mostró algo de rebeldía cuando sus padres se despidieron de él para ir a almorzar. Su padre, la única persona en el mundo capaz de dominarlo, le convenció para que se quedara en el que va a ser a partir de ahora su nuevo hogar en la Isla.

El CAMP.

El centro de atención a los discapacitados psíquicos profundos, dependiente del Instituto de Atención Social y Sociosanitaria del Cabildo, fue inaugurado el 30 de diciembre de 2002. Junto con el de Obispo Padre Cueto, en Guía, ha sido creado para atender a personas con grave discapacidad intelectual y evitar su traslado a la Península. Alberga a 62 pacientes residenciales y 20 plazas son de día.

No quería quedarse.

Pese al madrugón y al cansancio del viaje de Sevilla a Gran Canaria, Manolo se mostró en todo momento activo y muy locuaz. Atento a las indicaciones de su padre, saludaba a familiares y amigos y escudriñaba entre los regalos que le habían dado sus amigos de la capital hispalense. Cuando sus padres intentaron dejarle sólo en El Tablero, se negó, aunque terminó cediendo. Hoy tendrá fiesta.

Tres compañeros del centro de Sevilla convivirán con él.

El malhumor, al ver que sus padres se iban y le dejaban en el centro de El Tablero, se le pasó a Manolo como por ensalmo cuando aparecieron Mario, Alexis y Santiago, tres jóvenes que estuvieron ingresados con él en el Instituto Doctor Sacristán de Sevilla. Los cuatro muchachos se abrazaron alborozados y empezaron a hablar entre ellos, ajenos al resto del mundo. Los especialistas consideran que el hecho de que conviva con compañeros que ya estuvieron con Manolo en la capital hispalense hará más fácil su adaptación a su nuevo hogar.

El joven ingeniense, tras veinte años en Sevilla, se había creado un mundo donde figuraban sus compañeros, los médicos y el personal del centro. Ahora, con sus tres amigos de siempre, no echará tanto de menos un ambiente del que le sacaron justo cuando estaba confeccionando una carroza para la Feria de Abril. Ayer ya no se acordaba.

(c) Canarias7.es

No hay comentarios: