El ex novio de Toñi Cabrera, quemada por él hace año y medio en Ingenio, declara ante el juez. La hija de Toñi Cabrera, de apenas nueve años e igualmente herida por las llamas, también declarará durante el juicio.
El hombre que presuntamente intentó quemar viva a Toñi Cabrera, una joven del municipio de Ingenio, el pasado 10 de octubre de 2006 se declaró ayer en el Juzgado de Telde inocente de los cargos que se le atribuyen. Además de negar las acusaciones que se le imputan aseguró que en cualquier caso "todo fue un accidente", según informó a este periódico Ismael Rodríguez, abogado de la joven.
Por su parte, Toñi Cabrera espera que la realización del juicio sea lo antes posible y se condene "con la pena máxima" a quien fue su pareja durante unos meses. "A mí no me da miedo enfrentarme a él porque le voy a hacer frente, lo que me duele es lo que tiene que pasar mi hija", asegura la joven.
Insiste en que confía en la justicia. "Dios me dejó viva para solucionar esto y lo voy a hacer, tendrá que pagar por todo. Él llama un accidente a abrir la puerta y quemarnos, espero que pague por lo que hizo. Que se demuestre la verdad, ya que lo que dice no tiene sentido. Es muy duro ver a alguien que hizo tanto daño, sobre todo a mi hija y que encima mienta de forma descarada", añadió ayer indignada Toñi Cabrera.
Rodríguez aseguró que el juicio se celebrará lo antes posible con la hija de Toñi Cabrera, de nueve años como testigo directo de la presunta agresión y a la vez también agredida. El abogado recordó las graves quemaduras que sufrió Toñi Cabrera en casi la mitad de su cuerpo, lesiones que, a día de hoy todavía requieren de tratamiento físico y psicológico así como de sesiones de rehabilitación. La menor, aquejada de quemaduras leves en parte de su cuerpo, ya se ha recuperado físicamente pero arrastra problemas psicológicos desde ese día, como ansiedad y alteraciones en el sueño.
CONOCIDA CANTANTE. La joven, conocida en la comarca por su profesión de cantante, supuestamente fue retenida por su ex pareja junto a su hija en un cuarto de su domicilio y éste intentó quemarlas vivas. Toñi Cabrera fue hospitalizada varios meses en la Unidad de Quemados del Hospital General Virgen del Rocío de Sevilla y la menor fue tratada en el Hospital Insular con quemaduras leves.
La joven de 31 años de edad, tras varios días en coma se fue recuperando muy lentamente a pesar de que su estado era catalogado por los especialistas como crítico debido a la profundidad de las quemaduras. Tras varios injertos en brazos y piernas y transfusiones de sangre de sus hermanos, Víctor y Óliver Cabrera, Toñi Cabrera regresaba a la Isla.
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