TAXISTAS DE TELDE E INGENIO SE OPONEN A QUE LOS DE LA CAPITAL OPEREN EN GANDO

La polémica sobre el derecho de los taxistas a operar en el aeropuerto de Gran Canaria ha vuelto a abrir brecha entre los trabajadores de este transporte público de la capital grancanaria y del sur de la Isla, frente a los de Telde e Ingenio, que desarrollan este trabajo en estas instalaciones aeroportuarias. Representantes de cooperativas de Las Palmas de Gran Canaria, Mogán y San Bartolomé de Tirajana manifestaron ayer en el aeropuerto que "se sienten acosados" y reivindicaron su derecho a poder trabajar sin impedimentos en estas instalaciones.

Bernardo Suárez, presidente del sindicato de asalariados de los trabajadores del taxi de Telde, negó que haya una situación de acoso contra otros taxistas foráneos. "La Policía Local de Telde hace sus controles con normalidad y no hay acoso alguno. Lo que pasa es que los foráneos aprovechan antes de elecciones municipales o generales para repetir su reivindicación y buscar algún trato de favor. El tema es una herida abierta. Se trata de un derecho adquirido de los taxistas de Telde y de Ingenio", explicó Suárez.

El miembro sindical y presidente de la federación de asalariados de Canarias recordó que los taxistas que no son de los municipios beneficiados "sólo pueden recoger a un cliente en el aeropuerto cuando tienen un transfer, una autorización específica, para hacer un servicio concreto y acordado de antemano entre una empresa y el cliente al que se deja en Las Palmas de Gran Canaria u otro destino".

Los taxistas de Telde se muestran contrarios a la posibilidad de que la parada de taxis que se abrirá en el futuro Parque Marítimo de Jinámar se comparta con los taxistas capitalinos. "Se rumorea esta opción de compartirla, pero nos negamos porque el centro comercial está en Telde, igual que nosotros no podremos operar cuando se abra el área comercial del Mirador del Valle, que está en el municipio capitalino", afirmó Suárez.

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