En el colegio público Doctor Espino, de Ingenio, durante el recreo se dan aproximaciones a los más pequeños para que conozcan el vernáculo deporte de la lucha canaria. Los monitores se sorprenden, porque piden «hacer técnicas de pressing catch y sus ídolos son Batista y El Enterrador». Tiene pocos pelos en el bigote y un pendiente brillante en el lóbulo de la oreja, «como Beckham». Cursa sexto de primaria y en los recreos aprende a practicar la lucha canaria; Sin embargo ha dedicado mucho más tiempo de su vida a disfutar y pelear haciendo Pressin Catch. Pedro Hernández es un caso más en el colegio Doctor Espino de Ingenio, dónde durante varios recreos a la semana se les enseña a prácticar la Lucha Canaria.
«En el tiempo de ocio es fácil verlos jugando a Pressing Catch», dice un profesor del colegio, que afirma que «también se animan a hacer Lucha Canaria», sentenciando que «tienen pasión por distintos tipos de lucha».
Los terreros de lucha canaria han ido desapareciendo progresivamente de los colegios en Ingenio. Así lo han ido pidiendo los centros escolares, al ser un espacio al que «no se le da demasiada utilidad» y que «cuesta mantener». «Ya se sabe que aquí en el Sureste el viento se lo lleva todo y la arena vuela con facilidad», asegura el director del Colegio. Ahora se lucha en tatami y los monitores aseguran que «la caída duele más, pero es una buena solución, no hace daño y es menos costoso de mantener».
JuanRocamora es el concejal encargado de engrasar estos programas y de levantar la curiosidad por la lucha canaria entre los más pequeños. «No es una cuestión sencilla, porque la lucha, sobre todo en Gran Canaria está venida a menos y no tiene mucha relevancia en los medios de comunicación, por lo que no la ven apenas en televisión».
El pressing catch, sin embargo, logra grandes cuotas de audiencia entre los más pequeños y fue uno de los regalos estrella durante la pasada navidad. Los profesores alertan: «hay que tener cuidado con las imitaciones de los niños a los luchadores».
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